NO ROBARAS
Buenos días estimados hermanos/as, bendiciones en el nombre de Cristo.
He leído una nota periodística en la que se describe lo que pasajeros de vuelos aéreos se roban al abandonar la nave. Desde tazas y cubiertos hasta mantillas y almohadas, y aun los mismos chalecos salvavidas son blanco de las sustracciones. Lo que me llamó la atención es la explicación que dio un supuesto analista de este hábito. La explicación es que, debido a la cantidad de precios que imponen las aerolíneas, los pasajeros están enojados, por lo tanto, ventilan su frustración robando. Incluso, uno de los viajeros declaró que es una buena ladrona, pues, roba las mantas del avión y las regala a una escuela; un Robin Hood moderno por ponerlo de otra forma.
Pues bien, la verdad es que, si usted toma algo que no le corresponde esta robando. El robo es un delito. Y excusarse por los precios de las aerolíneas como una justificación para el robo, lo hace, no solo un ladrón que merece prisión o multa, sino que además agrega la falla de ser una persona inmoral. Con este criterio, cuando vemos a un mercado y vemos los precios altos, tenemos excusa para robarnos las cámaras de vigilancia, o los carteles de publicidad, o quizás, los carritos de compra y canastas de metal o plástico.
Parece mentira como se justifica todo lo malo y se trata de esgrimir argumentos que convenzan a los demás que tenemos algún derecho natural al hacerlo. Buscan la simpatía en lugar de la censura. Pues bien, lo están logrando. Tal es así que, si alguien roba para darlo a un necesitado, le dan un aplauso puestos de pie. Digo yo, ¿por qué no saca los bienes o el dinero de su propio bolsillo y los da a los desvalidos de la sociedad si se es tan solidario? Pero no, se roba a otro para darle a los pobres. Pues bien, usted es un ladrón y no, no ha dado nada a los necesitados, en tal caso, se lo dio aquel a quién se le robaron los bienes.
Así se muestra como la sociedad se va deteriorando cada vez más. Pues quienes encuentran una excusa plausible en este tipo de delitos, abrazan el latrocinio en sus mismas mentes. Hermano/a en Cristo, si usted es uno de tantos que viajan en avión o cualquier medio de transporte, si se hospeda en hoteles o va a un restaurante, por favor, en nombre de Cristo, no tome nada que no le corresponda o haya pagado su justo precio; eso es robo, pura y simplemente. Un hijo de Dios actúa según le dicta su conciencia cristiana, no la inconciencia de la sociedad caída. No robe. Trabaje por lo suyo, y si no lo puede hacer, no lo haga. Honremos a Dios con nuestros hechos por encima de todo. Considérelo.
El Pastor